A chef in a rustic Italian kitchen rolling pasta dough for homemade garganelli, surrounded by traditional tools like a garganelli comb and rolling pin

¿Cómo hacer Garganelli caseros? Guía completa de recetas

Si alguna vez ha tenido el placer de disfrutar de la pasta recién hecha, sabrá que cambia las reglas del juego. Entre los muchos tipos de pasta, garganelli destaca por su singular forma tubular estriada, que combina a la perfección con salsas cremosas o sustanciosas. Hacer esta deliciosa pasta en casa puede parecer intimidante, pero con las herramientas adecuadas y paciencia, se puede crear algo verdaderamente especial.

¿Listo para empezar? ¡Vamos a sumergirnos en la guía paso a paso para hacer garganelli caseros!


¿Qué es Garganelli?

Lo primero es lo primero: ¿qué son exactamente los garganelli? Originarios de la región italiana de Emilia-Romaña, los garganelli son una pasta laminada a mano que se elabora moldeando pequeños cuadrados de masa alrededor de una espiga de madera o un lápiz y enrollándolos después en una tabla estriada para crear su característica textura.

Dato curioso: El nombre "garganelli" procede de la palabra latina gargalaque significa "tráquea", porque su forma hueca y estriada recuerda a una pequeña garganta (apetitoso, ¿verdad?).

garganelli pasta ingredients


Herramientas necesarias

Antes de pasar a la receta, asegúrate de tener a mano las herramientas adecuadas. Esto es lo que necesitarás:

  • Garganelli peine o rigagnocchi (una tabla de madera estriada para dar forma)
  • Rodillo pequeño o espiga (¡un lápiz limpio también sirve!)
  • Tazón de mezcla
  • Cortador de pasta o cuchillo afilado
  • Horquilla
  • Superficie de trabajo limpia (una tabla de cortar grande o una encimera)
  • Agitador de harina (opcional, pero útil para espolvorear)

Ingredientes

Esta es la lista de ingredientes que necesitará para preparar suficientes garganelli para 4 raciones:

Ingrediente Cantidad
Harina común 2 tazas
Harina de sémola 1 taza
Huevos 3 grandes
Aceite de oliva 1 cucharada
Sal Una pizca

Guía paso a paso

Paso 1: Preparar la masa

  1. Preparar la mezcla de harina: Mezcle la harina común y la harina de sémola en una superficie de trabajo limpia. Forme un montículo y haga un hueco en el centro.
  2. Añadir ingredientes húmedos: Cascar los huevos en el pocillo y añadir el aceite de oliva y la sal.
  3. Mezclar: Utilice un tenedor para batir suavemente los huevos, incorporando gradualmente la harina desde los bordes del pocillo. Continúa hasta que quede desgreñado y como una masa.
  4. Amasar: Forme una bola con la masa y amásela durante unos 10 minutos hasta que esté lisa y elástica. Si está demasiado pegajosa, añade una pizca de harina; si está demasiado seca, añade una gota de agua.
  5. Descansa: Envuelva la masa en papel film y déjela reposar durante al menos 30 minutos a temperatura ambiente. De este modo, el gluten se relaja y la masa resulta más fácil de extender.


Paso 2: Extender la masa

  1. Divida la masa: Cortar la masa en porciones más pequeñas para que sea más fácil de manejar.
  2. Aplanar: Con un rodillo o una máquina para hacer pasta, enrolle cada porción en láminas finas de 1-2 mm de grosor. Debería poder ver su mano a través de la masa.
  3. Cortar cuadrados: Con un cuchillo o cortapastas, cortar la masa en cuadrados pequeños (de unos 5×6 cm).

Paso 3: Dar forma a los Garganelli

  1. Prepare su peine: Espolvorear ligeramente el peine para garganelli o la tabla estriada con harina para evitar que se pegue.
  2. Envolver y enrollar: Coloque un cuadrado de masa en diagonal sobre el tablero estriado y envuélvalo alrededor de la espiga o el lápiz. Presione suavemente para imprimir las crestas.
  3. Sellar los bordes: Enrolle la espiga hacia delante para sellar los bordes, creando una forma tubular. Deslice los garganelli fuera de la espiga.
  4. Repita: Continúa dando forma a los cuadrados de masa restantes. No te preocupes si no son perfectos, ¡es parte del encanto!

Paso 4: Cocer los Garganelli

  1. Hervir el agua: Poner a hervir agua con sal en una olla grande.
  2. Cocinero: Añadir los garganelli y cocer durante 2-3 minutos si son frescos o 5-6 minutos si son secos.
  3. Escurrir y servir: Mezcle con su salsa favorita y sirva inmediatamente.

Salsas Garganelli: ¿Con qué acompañarla?

Los bordes de los garganelli son perfectos para retener las salsas. He aquí algunos maridajes deliciosos:

  • Alfredo cremoso: Una salsa rica y cremosa se adhiere maravillosamente a las crestas.
  • Boloñesa: La salsa de carne tradicional aporta un sabor intenso.
  • Pesto: El pesto de albahaca resalta la frescura de la pasta casera.
  • Mantequilla y salvia: Una elección sencilla pero elegante para presentar la pasta.

Consejos para solucionar problemas

Problema Solución
La masa está demasiado seca Añadir unas gotas de agua y volver a amasar.
La masa está demasiado pegajosa Espolvoréelo con un poco más de harina al extenderlo.
Garganelli no mantiene la forma Asegúrese de presionar firmemente al enrollar.

¿Por qué hacer Garganelli en casa?

La pasta hecha en casa no es sólo una cuestión de sabor, es toda una experiencia. Estirar la masa, darle forma a mano y ver cómo cobra vida tu creación es increíblemente satisfactorio. Además, la pasta comprada no puede competir con la textura y el sabor de los garganelli frescos.

Además, hacer pasta es divertido para compartir con la familia y los amigos. ¿Quieres impresionar a alguien? Sírveles tus garganelli hechos a mano y verás cómo se quedan boquiabiertos.


Preguntas frecuentes

1. ¿Puedo congelar los garganelli?

Por supuesto. Coloque los garganelli moldeados en una bandeja para hornear enharinada, congélelos hasta que se solidifiquen y, a continuación, páselos a un recipiente apto para el congelador. Durarán hasta 2 meses.

2. ¿Necesito una máquina de pasta para hacer garganelli?

En absoluto. Aunque una máquina para hacer pasta puede ayudar a extender la masa de manera uniforme, un rodillo de amasar funciona perfectamente.

3. ¿Puedo preparar garganelli sin gluten?

Sí, sólo tienes que utilizar una mezcla de harinas sin gluten diseñada para pasta. La textura puede variar ligeramente, pero seguirá estando deliciosa.


Reflexiones finales

Los garganelli caseros son algo más que pasta: son una labor de amor. Desde mezclar la masa hasta dar forma a cada pieza, cada paso contribuye a la alegría de crear algo desde cero. No se precipite en el proceso; el objetivo no es la perfección, sino la delicia. Así que arremánguese, prepare sus herramientas y lleve un trocito de Italia a su cocina. Para obtener más información interesante, visite nuestro sitio.

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